El Banco Europeo de Inversiones (BEI) aportará 175 millones de dólares US para financiar la recuperación de una de las zonas más dañadas por el terremoto que sufrió Ecuador el pasado mes de abril. El Vicepresidente del BEI, Román Escolano, y el Ministro de Finanzas de Ecuador, Fausto Herrera, han firmado hoy en Luxemburgo un préstamo destinado a la construcción y reparación de infraestructuras sociales básicas destrozadas por el terremoto en la provincia de Manabi.
El apoyo financiero del BEI contribuirá a reconstruir escuelas, hospitales y carreteras y a rehabilitar plantas que permitan el suministro de agua y energía a la población. Este préstamo, concedido bajo el Mandato de préstamos para América Latina 2014-2020 de la Unión Europea, ayudará además a reactivar la economía contribuyendo a la creación de empleo en una zona donde más de 20.000 mil personas perdieron su trabajo tras el terremoto.
El Vicepresidente del BEI, Román Escolano, ha destacado hoy en el acto de firma la importancia de este proyecto para «recuperar servicios vitales para la población ecuatoriana y promover, al mismo tiempo, una recuperación económica sostenible que permita volver a los niveles de productividad que había antes del terremoto en Ecuador.»
Por su parte, el Ministro de Finanzas de Ecuador, Fausto Herrera, ha resaltado la concreción de este apoyo financiero del BEI «porque servirá para continuar atendiendo a la población afectada por el terremoto, aspecto que es prioritario para el Gobierno ecuatoriano» y ha indicado que «este aporte forma parte del paquete crediticio que estaba programado contratar para reconstruir las zonas que sufrieron las consecuencias del sismo y así dotar a la ciudadanía de importantes servicios públicos.»
Préstamo para la primera línea de metro en Quito
Además, el BEI y la República de Ecuador han firmado hoy un préstamo de 44 millones de dólares US para la construcción de la primera línea de metro en Quito. Las obras comenzaron en 2013 gracias a un primer préstamo de 259 millones de dólares US del BEI y se encuentran ahora mismo en la segunda fase. La previsión es que la nueva línea de metro, la primera que existe en el país, empiece a funcionar en 2019. Tendrá 22 kilómetros y medio de longitud y capacidad para transportar a más de 400.000 personas al día. La financiación del BEI permitirá construir 15 estaciones, un depósito taller y adquirir 18 trenes.
El proyecto, cubierto también por el acuerdo de garantías de la UE, forma parte de la estrategia del BEI para impulsar las inversiones en transporte urbano sostenible. En concreto, el nuevo metro de Quito permitirá reducir la emisión de gases contaminantes en 30.000 toneladas.